domingo, agosto 29, 2010

Devil May Cry


Tras hacerme el Final Fantasy X, decidí cambiar un poco de género y probar algo distinto. Hace muchísimo tiempo que no me hacía un juego de acción, y Devil May Cry me llamó mucho la atención. Tenía entendido que era un juego difícil pero interesante, y tras hacerme el modo supuestamente "Normal", estoy de acuerdo en ambos aspectos :-P. Si me ha costado tanto el modo Normal, no sé cómo puede ser el modo Dante Must Die... pero bueno, iré haciéndome el Hard poco a poco intercalando con el Persona 4.

La estética del juego es tétrica y terrorífica, y le acompaña muy bien la música. Las últimas fases, en que parece que estás directamente dentro de un cuerpo, son espeluznantes: partes del escenario laten, otras se mueven de forma un tanto sospechosa, y algunas paredes tienen apéndices que pueden cogerte y hacerte daño. Después de tanto zombi en todo survival horror, es un cambio que se agradece. Lo único que no me convence nada es el modelo 3D de Trish, la chica "sexy" del juego: los dedos en particular quedan rarísimos. Pero bueno, para ser de 2001, está fetén, y Dante es más chulo que un ocho :-D.

Al estilo de otros juegos de acción (aunque con mucho más énfasis), Devil May Cry exige reconocer los patrones que siguen los enemigos, y desarrollar contramedidas para cada uno de ellos. Además, este juego añade la idea de "pelear con estilo", asociando a cada combinación una puntuación que va desde "Dull" hasta "Stylish". Por ejemplo, matar un enemigo a base de granadas es efectivo pero poco interesante, pero darle dos mandobles, mandarlo al aire y rematarlo con las pistolas es Stylish :-D.

El manejo es complicado pero una vez se le coge el tranquillo tiene sentido: utiliza un sistema que te asigna automáticamente un objetivo al pulsar R1, pudiendo entonces usar las armas de fuego y esquivar fácilmente. En cuanto a las armas de fuego, cada una cumple su cometido: el juego está muy bien diseñado y ninguna de las armas queda obsoleta por las demás: las pistolas pueden dispararse sin parar y permiten mantenerse más tiempo en el aire; la escopeta tiene un área de efecto muy amplia, útil para enemigos escurridizos y el lanzagranadas es potente pero muy lento, y no puede dispararse en el aire. La que me decepcionó (y finalmente casi no usé) es Nightmare-beta: es demasiado costosa de disparar, gastando una runa del Devil Trigger.

Precisamente el Devil Trigger me ha parecido otra decisión de diseño muy acertada: el personaje puede activar su linaje demoníaco cuando se acumula la suficiente energía, aumentando sus poderes , regenerándose y activando ciertas habilidades (que hay que comprar previamente). Las habilidades dependen del arma de cuerpo a cuerpo (Devil Arm) que usemos: hay 4 espadas y unos puños. Combinando las armas de cuerpo a cuerpo con las de fuego se pueden crear muchos estilos, y cada jefe/enemigo exige uno en particular. Cuestión de probar y pensar un poco :-).

Juego fantástico, pero requiere mucha paciencia y cierta habilidad con los mandos: creo que cada jefe me habrá matado un mínimo de 5 veces en esta vez. A ver si mejoro un poco y consigo algún A-rank o S-rank :-|. Muy recomendado.

lunes, agosto 16, 2010

Final Fantasy X (PAL)

El anterior viernes tuve un rato libre, y por fin pude terminarme de corrido la última parte de Final Fantasy X. Curiosamente, es el primer Final Fantasy que me termino: los de NES no los he probado, el Magical Quest de la SNES no tenía chicha, el 4 estuve a punto pero no subí lo bastante y en la Luna me era imposible avanzar, el 6 y el 7 no pude terminarlos por falta de tiempo y se me perdió la partida, el 8 no me gustó y la copia que conseguí del 9 tenía el segundo disco rayado :-/.


La verdad es que en general FFX no es un juego demasiado difícil: alguna que otra vez me han matado (creo que una vez con Seymour Natus y otra en un ataque sorpresa por algún Molbol), pero más que nada porque odio hacer grinding por lo general (en el Persona 3 FES me resultaba más llevadero), y suelo ir bajo en niveles. Pero nada que ver con la tortura china del "The Answer" del P3:FES :-D.


Cuando me paré y le dediqué algo de tiempo, prácticamente arrollaba a los enemigos. Terminé el juego con Yuna, Auron y Wakka: Yuna para curar, Auron como tanque y Wakka como ataque. Tenía las armas celestiales de Auron y Wakka y armaduras con Auto-Phoenix y Auto-Haste, y con Wakka hacía 99999 de daño por toque: creo que sólo ha habido un jefe en la fase final del juego que haya aguantado más de un golpe. La verdad es que eso de vencer al jefe final con una pelota de playa (vale, con pinchos, pero es una puñetera pelota de playa) le quita toda la epicness al tema. Recuerdo ir algo por encima de niveles contra Nyx en el Persona 3, pero a pesar de todo la pelea duró como 30-45 minutos :-X.


De todos modos, es bastante entretenido. La historia está muy bien hecha (el final es de los mejores que conozco), y los gráficos y música acompañan muy bien. Es un poco rollo que muchos monstruos sean versiones de otros con la paleta cambiada, pero bueno, esto también pasa en el P3:FES, así que tampoco me voy a quejar mucho :-D. El sistema de combate es un híbrido entre el sistema activo típico de los FF y un sistema por turnos basado en velocidad típico de otros, como los Dragon Quest. Creo que está cogido del Final Fantasy Tactics, si no recuerdo mal.


Otro detalle interesante es la rejilla de esferas, que da mucha flexibilidad a la hora de construir los personajes y hace que sea más interesante que simplemente ir subiendo y subiendo de niveles sin más. Lo único malo es que se conoce que se me ha dado mal recoger esferas de nivel 4, porque no recuerdo usar ninguna :-|.


Primer punto negro del juego: los minijuegos. Odio el blitzball. Lo odio mucho. Al principio es interesantillo, pero realmente, si te quitas de encima a esa porquería de equipo inicial, te pones un par de jugadores decentes y luego juegas con un poco de cabeza, está tirado. El problema es que para conseguir World Champion (el arma celestial de Wakka) me tuve que hacer por lo menos 50-60 partidos >_<. Si a eso se le añade lo que hay que hacer para conseguir las armas celestiales de los demás, apaga y vámonos. ¿Esquivar 500 rayos? ¿Terminar una carrera con pésimos controles y detección de colisiones en 00:00 (contando bonificaciones)? ¿Recoger mariposas? Anda ya :-P.


Otro punto negro del juego es el diseño. En serio: ¿por qué Tidus lleva esas horribles ropas? ¿Por qué tiene un brazo con armadura y el otro no, y por qué tiene una pierna del pantalón más larga que la otra? ¿Por qué Lulu no sufre de dolor de espalda y catarros, y por qué su falda está hecha a base de correas? ¿Por qué Wakka pelea con una pelota de playa y tiene un tupé que daría envidia a Elvis Presley? En fin, por lo menos los diseños de Auron y Yuna están bastante bien.



Tidus: volviendo loco a su modista



Auron: un diseño decente, ¡por fin!


En fin, de todos modos, no hay muchas pegas que pueda ponerle. Es un ejemplo de un buen JRPG con el que se puede pasar un buen rato. Creo que es mucho mejor ver los análisis de The Spoony Experiment (parte 1 y parte 2) que leer este artículo: contiene muchas grandes verdades sobre este juego :-D.

sábado, agosto 07, 2010

Natsume Yuujinchou


Natsume y Madara


Acabo de terminar el último episodio de la segunda temporada de Natsume Yuujinchou (夏目友人帳, "El Libro de Amigos de Natsume"). Se trata de una serie de Youkai (妖怪, "espíritus") en la que un chico que ha sido despreciado desde pequeño por sus poderes va haciéndose un grupo de amigos y encajando en su familia.


Me recuerda mucho a series del tipo de Mushishi, pero tira más hacia feel-good, centrándose en la relación de Natsume con humanos y Youkai, por lo que resulta mucho más agradable de ver. El dibujo no está mal. La música acompaña razonablemente bien, pero el opening y ending no me llaman nada :-/.


La historia es básicamente de tipo episódico: a lo largo de las dos temporadas, han aparecido 1 o 2 personajes nuevos, y poco más. De todos modos, me imagino que seguirá en el manga, ya que al final de la segunda temporada, realmente no ha pasado gran cosa.


Vamos, que no va para clásico, pero es una serie agradable y tranquilita.



Natsume, Taki y Madara (algo más crecidito)